En términos comprensibles para todos, el valor real de un objeto es el precio que tendría de segunda mano en Wallapop. En el fondo, es lo que costaría hoy un artículo (de la misma marca y modelo), menos la depreciación.
El valor real es la forma en que algunas aseguradoras cotizan la mayoría de los siniestros de bienes personales a sus asegurados. Es decir, si te roban la moto, la mayoría de las aseguradoras calculan el valor real de la moto para determinar cuánto te pagarán por ella
Coste de reposición - Depreciación = Valor real
Así que, digamos que te han robado un ordenador que compraste hace dos años por 1.000 € y que tiene unas expectativas de vida útil (lo que se puede utilizar) de 8 años. A este ordenador le corresponde una depreciación de un 25% (se han consumido 2 de 8 años de su vida útil) que significa 250 €. Si ese mismo ordenador cuesta hoy 850 € (el valor de reposición), el valor real de tu ordenador sería de 600 €.
El coste de reposición es más sencillo de entender: piensa en él como el "precio de Amazon" de lo que costaría tu artículo (de la misma marca y modelo) hoy, si fuera nuevo.
Es decir, si originalmente compraste unos auriculares por 200 € y el precio de venta actual de la misma marca y modelo es de 150 € (o de similares características), ése sería tu coste de reposición.
Calcular la depreciación es un poco más complicado, porque aunque hayas conservado algo en perfecto estado, sigue envejeciendo. A diferencia del vino (o los ferraris), que aumenta su valor con el tiempo, la mayoría de los objetos cubiertos por una póliza de seguro de hogar bajan de valor con el tiempo.
Piensa cuando compras un coche nuevo: en el momento en que sales del concesionario, ha perdido valor.
Esto puede ser evidente, pero las cosas que se dañan también han perdido valor. Digamos que has comprado un portátil nuevo y se te ha caído de camino a casa desde la tienda. Si intentas venderlo por Internet ese mismo día, no valdrá lo mismo que lo compraste, aunque funcione correctamente. Y las pantallas de los móviles, las bicicletas y así hasta casi cualquier objeto.
Aunque los ejemplos anteriores ponen de manifiesto la depreciación de forma conceptual, las aseguradoras suelen determinar la depreciación como un factor de "vida útil", que es esencialmente el tiempo que suele durar algo antes de que deje de funcionar o se rompa (como hemos aplicado en el ejemplo de principio del artículo).
¿Moraleja de todo este rollo? Cuando compras algo, envejece y pierde su valor. Eso es la depreciación.
Coste de reposición x Porcentaje de vida útil utilizada = Depreciación
Supongamos que compraste un televisor hace 3 años por 800 €, y que una tubería rota en tu casa lo ha estropeado. Pero como eres un tipo previsor, contrataste un seguro de hogar para inquilinos de Tuio (¡Vamossss!) y das un parte de siniestro.
Utilicemos lo que hemos aprendido antes:
Consejo pro: Asegúrate de guardar siempre tus recibos. No solo son necesarios para tramitar garantías sino que será mucho más fácil que recuperes el valor de tus cosas en un siniestro.
Entonces, el valor real es el dinero que recibirás de tu aseguradora cuando se apruebe una reclamación, ¿verdad? Bueno, pues depende.
Hay una cosa más a tener en cuenta: el pago de tu siniestro es el valor real menos tu franquicia.
Como recordatorio antes de seguir, la franquicia es una cantidad de dinero que comprometes cuando compras tu seguro y que tendrás que restar de cualquier siniestro futuro.
Volviendo al ejemplo de la sección anterior, si eliges una franquicia de 50 €, al final del día recibirás 400 € por tu tele (450 € de valor real menos la franquicia de 50 €).
Nota: En Tuio, ofrecemos cobertura para tus cosas sobre la base del coste de reposición para los dos primeros años. Eso significa que cuando haces una reclamación, no tenemos en cuenta la depreciación a la hora de calcular el valor de tu artículo durante estos dos años. Al final, pensamos que es lo justo.