Ya seamos un particular o empresa, siempre que solicitemos una operación de crédito, préstamo o aval, la entidad financiera nos otorgará un valor como cliente (scoring). De este modo evalúa nuestro nivel de riesgo y, si la operación es aprobada, las condiciones del préstamo se fijarán en función de nuestro perfil.
Y es que un préstamo no se concede de cualquier manera ni en cualquier contexto. Es posible que nos denieguen la operación o lo hagan a un alto coste si por ejemplo alguna de nuestras operaciones financieras resultó impagada (lo que se conoce como morosidad). Para clarificar en qué situación nos encontramos, la entidad consultará un informe de la CIRBE.
Qué es la CIRBE
Es el nombre abreviado de la Central de Información de Riesgos del Banco de España. Nos referimos a una base de datos en la que figuran los clientes que tengan préstamos personales, hipotecas, créditos, avales y garantías contratados con una entidad financiera.
Esto no quiere decir que al solicitar alguno de estos servicios automáticamente apareceremos en la CIRBE. Solo figuran en ella titulares cuyas contrataciones superen la cantidad de 1000 € (hasta 2021, esta cantidad era de 9000 €).
Por tanto, las deudas tienen que cumplir con dos requisitos:
- Alcanzar como mínimo esa cantidad.
- Que se hayan firmado con una sola entidad financiera.
Este dato es importante, ya que si hemos solicitado, por ejemplo, un préstamo de 10 000€ con un banco A estaremos incluidos en el informe; pero no si tenemos un préstamo de 500€ con el banco A y otro de 500€ con el banco B.
No se trata de un registro de morosos
Como base de datos, la CIRBE es un registro que sirve de ayuda para que las entidades bancarias tengan el background necesario de sus clientes. Este registro puede cruzarse con otros, tales como RAI (Registro de Acciones Impagadas) o ASNEF (Asociación Nacional de Entidades de Financiación, cuyo nombre se ha actualizado).
Estos últimos sí que son registros de morosos. Por el contrario, la CIRBE es un listado de titulares con los que una entidad mantiene algún tipo de riesgo.
Para qué sirve la CIRBE
La Central de Información de Riesgos tiene dos finalidades principalmente:
- Facilitar al Banco de España una de sus principales tareas, que es la de supervisar e inspeccionar a las entidades de crédito que operen en el país.
- Proporcionar a las entidades y los titulares la información precisa sobre la deuda contraída.
H2 Cómo solicitar un informe de la CIRBE
Podemos acceder a dicho informe cuando lo deseemos, siempre que seamos nosotros las personas implicadas. Es decir, no podremos consultar los datos de terceros.
Para comprobar tu registro en la CIRBE, deberás solicitar dicho informe. Para ello, accede a la web del Banco de España y sigue el proceso. Recibirás el informe de manera mensual si así lo solicitas.
H2 Qué datos aparecen en el informe
En realidad cabe hablar de informes CIRBE, en plural. Atendiendo a su diferenciación respecto al destinatario, estos informes serán más o menos detallados.
- Uno de ellos es de carácter mensual, menos detallado, y está destinado a las entidades una vez que el préstamo se ha concedido. En este informe figura el total del importe por cada préstamo así como otros detalles; por ejemplo, los plazos en los que se enmarca.
Si las entidades lo solicitan así al Banco de España, este proporcionará la información necesaria sobre cualquier titular que haya solicitado una operación de riesgo en algún momento, o que figure como obligado a un pago.
- El otro informe CIRBE es el que detalla los riesgos sobre cada información, y este va destinado al titular que lo solicite mediante el proceso arriba explicado. Este documento permite consultar cuál es el estado actual de la deuda, que en condiciones normales se encuentra en situación regular.
Por qué tu banco pide tu CIRBE
En definitiva, es un hecho que la concesión o no de un préstamo o crédito depende en gran medida de nuestro perfil económico; y la razón por la cual las entidades solicitan este informe es porque deben analizar previamente cuál es la situación económica del solicitante. Y es que, en términos prácticos, este es el único modo de comprobar si hay garantías de devolución del préstamo y sus intereses.