Casas inteligentes: qué es la domótica

Imagina tener una central de operaciones en tu hogar desde donde controlarlo todo. Desde el despertador, los electrodomésticos, las luces… ¡hasta la temperatura del agua! Pues ya no hace falta que imagines más, porque gracias a la domótica las casas inteligentes ya han llegado al presente.

Qué es y para qué sirve la domótica

En realidad, las casas inteligentes -o smarthome- funcionan de manera muy simple: todos los aparatos de tu hogar están conectados entre sí gracias a la red Wi-Fi (u otro sistema de interconexión). A esto se le llama sistema domótico, y solo necesitas una tablet, un móvil o un ordenador para controlar la domótica de tu casa. Así puedes programar distintos parámetros, automatizar ciertos procesos en tu hogar o controlar muchas de las tareas de manera remota, ¡como tener un solo mando a distancia para todos los aparatos de la casa!

Cualquier sistema de domótica se diseña para contribuir al bienestar, a la comodidad y a la seguridad de la persona usuaria dentro de su casa. Sin embargo, las casas inteligentes también juegan un papel esencial en el desarrollo de ciudades inteligentes y más eficientes. Y aunque la domótica está cada vez más presente en las empresas, ¡ya ha llegado la hora de que se normalice su uso en el hogar!

Aplicaciones de la domótica en tu vivienda

Ya que la domótica permite controlar de manera automática cualquier espacio de tu hogar, puede facilitar tu vida en muchas áreas distintas:

Accesibilidad

Uno de los beneficios fundamentales de la domótica es la adaptación del hogar a la persona usuaria. En otras palabras, es la aplicación de la tecnología para favorecer la autonomía de cualquier persona en su hogar. 

Desde cuestiones tan simples como poder dar o quitar el agua sin necesidad de abrir el contador hasta la transmisión de información del usuario en tiempo real a sus cuidadores. Una casa inteligente ayuda tanto a personas con diversidad funcional como a personas mayores a mantener un estilo de vida digno y menos dependiente.

Ahorro energético

Ahora con la domótica es más fácil ahorrar en tu factura de la luz, del agua o del gas. ¿Cómo? Gracias a la gestión eficiente de los aparatos de tu casa. Puedes controlar el termostato de cualquier aparato, programar el uso de las persianas, controlar la temperatura del termo, etc. 

Por supuesto, también puedes controlar la energía eléctrica y ver el consumo que marca el contador. Por ejemplo, puedes programar la desconexión de los aparatos no necesarios durante la noche o en las franjas horarias con tarifas más caras.

Confort

Cuando hablamos del confort en el hogar no solo hablamos de la suavidad de las sábanas o la temperatura del hogar. Las luces, los sonidos, la intimidad o la privacidad también forman parte del confort hogareño. 

La domótica te permite regular la intensidad de las luces o el volumen de cualquier aparato para crear ambientes adecuados a cada situación. También puedes controlar el acceso a Internet de los más pequeños de la casa para tu tranquilidad. O incluso programar tu hora de llegada para que la casa te reciba con tu canción favorita.

Seguridad

Por supuesto, un aspecto fundamental de las casas inteligentes es la automatización de la seguridad de tu hogar. Gracias a la domótica puedes programar tu alarma antirrobo, cerrar las persianas a cal y canto, y simular que hay presencia en el hogar para ahuyentar posibles intrusos. 

También puedes pedir asistencia de manera telemática o incluso establecer “cerraduras inteligentes” para el acceso del portero al edificio. Al mismo tiempo, puedes apagar el horno que te dejaste encendido al salir de casa o pedir asistencia médica de manera automática si sufres un accidente.

Comunicaciones

Cuando hablamos de comunicación domótica no solo hablamos de poder usar los sistemas de intercomunicación de la casa, la teleasistencia o el acceso al telefonillo de manera remota. 

También cabe destacar la comunicación entre la persona y su hogar. Por ejemplo, el telemantenimiento o los informes de gastos ayudan a que la persona usuaria sea más consciente del estado de su hogar ¿Cómo? Porque su casa inteligente envía información en tiempo real a la persona usuaria y le comunica cualquier incidencia o le mantiene al tanto de sus propias tareas programadas.

Cómo funciona una casa con domótica o casa inteligente

Al final, una casa inteligente te ayuda a reducir el tiempo que le dedicas al trabajo doméstico. Pero es que además te ayuda a gestionar tu hogar de manera más eficiente. Y lo único que necesitas para beneficiarte de la domótica en tu hogar es:

• Una central de gestión -ya sea un aparato específico o un dispositivo móvil-.
• Sensores o detectores en cada aparato eléctrico del hogar.
• Actuadores que generen las órdenes programadas.
• Y un soporte de comunicación como tu red eléctrica existente.

Cómo instalar un sistema domótico en tu vivienda

Afortunadamente, no es necesario realizar grandes obras en el hogar para instalar tu propio sistema de domótica. Lo que es fundamental es tener una clara idea de qué aspectos del hogar queremos automatizar: ¿qué quiero controlar de manera remota?, ¿qué aparatos quiero programar? ¿qué tipo de notificaciones quiero recibir de mi casa inteligente?

El coste de la instalación domótica dependerá en gran medida de las respuestas a estas preguntas, de la dimensión de la vivienda y de la necesidad de instalar cableado o no.

Existen varios productos en el mercado con los que comenzar a domotizar tu casa, como los enchufes o las bombillas inteligentes. Pero si quieres convertir todo tu hogar en una casa inteligente, lo más recomendable es consultar con CEDOM, la Asociación Española de Domótica e Inmótica. A través de ellos podrás contactar con fabricantes, ingenieros, arquitectos y técnicos especializados en domótica que, además de realizar cualquier instalación, te podrán aconsejar cúal es la mejor estrategia para tu hogar y crear un plan de implementación inteligente.

¿Lo mejor de todo? Que instalar un sistema domótico en tu casa te permitirá ahorrar tanto a lo largo de los años que terminarás recuperando tu inversión, ¡además de vivir en un hogar que te facilita la vida día tras día!