¿Cuál es la diferencia entre robo y hurto?

En el lenguaje común, no suele haber mucha diferencia entre robo y hurto. La gente los usa como sinónimos y, si alguien habla de hurto en lugar de robo da la sensación de que es una persona especializada en lenguaje. Pero es que, en realidad, un robo y un hurto no son lo mismo y esto puede afectar en caso de que te suceda. ¿Quieres que te expliquemos las diferencias entre ambos conceptos? No te preocupes, es más fácil de lo que parece.

¿Qué es un hurto?

Jurídicamente, el hurto se define como un hecho delictivo contra el patrimonio consistente en tomar cosas ajenas, sin la voluntad del dueño y con ánimo de lucro, y en su realización no se utiliza violencia ni intimidación en las personas ni fuerza en las cosas.

Un caso de hurto en un hogar podría ser cuando alguien se deja abierta la puerta de su casa y una persona aprovecha para entrar y llevarse un objeto de valor, como la televisión, un ordenador portátil o un cuadro.

¿Qué es un robo?

La definición jurídica de robo es el hecho punible por el que una persona, con ánimo de lucro, toma cosas ajenas utilizando fuerza en las cosas o violencia e intimidación en las personas.

Cuando el robo es con fuerza en las cosas, se distinguen varios supuestos:

• escalamiento;
• rompimiento de pared, techo, suelo o fractura de puerta o ventana;
• rotura de armarios, arcas o muebles cerrados o sellados, forzamiento de sus cerraduras o descubrimiento de sus claves para poder sustraer su contenido;
• utilización de llaves falsas;
• inutilización de sistemas de alarma o guarda.

Siguiendo el ejemplo anterior, en caso de robo, para llevarse la televisión, un ordenador portátil o un cuadro, el ladrón ha de forzar la cerradura de la puerta o tiene que mantener una disputa física o violenta con el propietario o habitantes de la vivienda.

¿Cubren los seguros de hogar los robos y los hurtos?

Para responder a esta pregunta hay que tener claro que cada seguro de hogar es distinto y no todos los seguros de hogar cubren los mismos conceptos.

Primero, hay que saber si el seguro de hogar cubre solo el continente o si también cubre el contenido. Una vez que tengamos certeza de que el seguro de hogar cubre el contenido, hay que conocer si el valor del contenido también está protegido en caso de robo y en caso de hurto.

La cobertura de contenido es muy recomendable

En el fondo, cada persona puede contratar casi exclusivamente lo que desea y hay muchas veces en las que se descarta asegurar el contenido, ya sea porque carece de importancia para el contratante de la póliza o porque, simplemente, se quiere ahorrar parte de la cuota.

Pero lo más recomendable es contratar un seguro de hogar que cubra también el contenido, ya que las posesiones materiales que guardamos en nuestros hogares, sobre todo si son las primeras viviendas, pueden tener un valor considerable que costaría mucho reparar si hubiera que pagarlo del propio bolsillo.

Estamos hablando de supuestos que van más allá de los del robo y el hurto, ya que los bienes contenidos en la vivienda pueden sufrir daños en muchos otros casos, como incendio, inundaciones, etc.

Protégete ante robos y hurtos con Tuio

Contar con un seguro de hogar que pueda protegerte ante robos y hurtos en tu vivienda te puede dar un plus de tranquilidad muy importante. Con Tuio, estarás siempre cubierto contra robos, ya que te protegemos contra el apoderamiento indebido de tus bienes asegurados por parte de terceros, cuando éstos utilicen la fuerza para entrar en tu hogar, o mediante violencia o intimidación en las personas. Es más, también cubrimos los bienes que te puedan sustraer en la vía pública (atracos).

Y si quieres una tranquilidad absoluta, contrata nuestro paquete Paz Mental y protégete ante casos de hurto en tu vivienda, ya que quedarás cubierto contra el apoderamiento indebido de tus bienes asegurados por parte de terceros, aunque para ello no sea necesario que estos fuercen