Un perro es un compañero de viaje, en sentido literal y figurado. Para llevarlo contigo a tus destinos favoritos debes asegurarte de que puede viajar seguro de tal manera que se maximice su bienestar y tú ganes en tranquilidad. En este post te daremos las pautas que debes recordar para que tu mascota viaje cómoda y segura contigo y tus vacaciones con perro sean cómodas y placenteras.
¿Qué precauciones debes tener al viajar con tu perro?
Viajar con perro implica más que un simple paseo largo: es desplazarse a destinos desconocidos, adaptarse a nuevas rutinas y posiblemente compartir espacios con otros viajeros y mascotas. Por tanto, es fundamental observar la máxima precaución durante el trayecto. Recuerda que estas recomendaciones son generales y pueden variar según el tipo y tamaño de tu perro.
Protección del perro durante el viaje
Tu seguridad y la de tu perro son tu responsabilidad, y también debes considerar la seguridad de otras personas y animales en el caso de que otros pasajeros viajen con sus mascotas. Asegúrate de llevar contigo elementos básicos de retención como correa, bozal —aunque no sea de raza considerada PPT—, collar, arnés, etc., junto con sus chapas identificativas.
Cumplimiento de la normativa legal
Antes de planificar tus vacaciones con mascotas, infórmate sobre las regulaciones locales, regionales, nacionales o internacionales relativas a los viajes con perros. Algunos viajes pueden requerir certificados de salud u otros documentos específicos, como el pasaporte canino y las vacunas actualizadas.
Consejos para viajar con perros de forma segura
Hacer un viaje seguro con tu perro es crucial para una experiencia libre de estrés. Aquí hay algunos consejos útiles:
Planificación del viaje
Asegúrate de que en tu alojamiento se permiten mascotas. Adicionalmente, investiga sobre las instalaciones pet-friendly en tu destino para poder incluirlo en tus planes. Consulta con tu veterinario si es necesario administrarle medicamentos calmantes o antieméticos para el viaje.
Preparación del perro
Para el viaje, prepara comida y agua, y bolsas de plástico para recoger sus excrementos. Puedes hacerle el trayecto lo más cómodo posible proporcionándole una manta o juguetes si los necesita. No está de más bañar a tu mascota antes del viaje para que viaje más cómodo y no cause posibles molestias a otros pasajeros, si se plantea esta circunstancia.
Muchos perros pueden mostrarse nerviosos o estresados ante las aglomeraciones o los cambios de rutina, o sufrir mareos en el trayecto. Tu veterinario podrá indicarte si es necesario administrarle algún medicamento calmante o antiemético.
Asimismo, infórmate en la consulta de los parásitos a los que puede exponerse en el lugar de destino. Por ejemplo, en zonas rurales abundan más las garrapatas y las pulgas, así como los mosquitos que propagan las leishmaniosis.
Durante el viaje
Durante el viaje, haz paradas regulares para hidratarte y moverte. Mantén a tu perro controlado en todo momento y nunca lo dejes desatendido. En medios de transporte compartidos, como trenes, asegúrate de cumplir con las normativas sobre bozal y restricciones de tamaño.
Seguridad en diferentes medios de transporte
Viajar en coche
Respeta la normativa al volante en lo relativo al transporte de mascotas. Los perros deben usar dispositivos de seguridad específicos para ellos, como arneses de seguridad o transportín si su tamaño lo permite, por norma general en el asiento trasero; en cualquier caso, jamás debe viajar suelto. Evita colocarlo en el asiento delantero o que asome la cabeza por la ventana.
Por último, jamás lo dejes solo en el coche, aunque sean unos minutos, e independientemente de la época del año. Anualmente se reportan cientos de casos de perros que mueren asfixiados cuando sus dueños los dejan dentro del vehículo en épocas muy calurosas, ya que las temperaturas en el interior pueden llegar a duplicarse.
Viajar en avión
Antes de adquirir los billetes de avión deberás verificar las políticas de la aerolínea sobre los viajes con mascotas ya que aunque lo normal es que se permitan algunas presentan ciertas restricciones. Si su tamaño lo permite, deberás instalar a tu perro en un transportín. Asegúrate de seguir todas las pautas de transporte y documentación exigidas por la aerolínea.
Si se trata de un vuelo internacional, recuerda que muchos países pueden requerir que lleves contigo la documentación oficial de tu perro (identificación, cartilla de vacunas actualizada, etc.) en virtud de la protección de la salud pública nacional.
Viajar en tren
Del mismo modo, deberás consultar las políticas de la compañía ferroviaria con la que viajes. En algunas ocasiones deberás pagar un suplemento por tu animal de compañía y puede que existan restricciones relativas a su tamaño, o que necesite viajar con bozal.