¿Cuándo es mejor contratar un seguro de vida?

Según un informe de Unespa de 2018, que a su vez toma datos del INE, en España la contratación de seguros de vida la realizan mayoritariamente personas casadas de entre 35 y 44 años. La vida en pareja, y la maternidad o paternidad, son circunstancias que empujan a hacerlo. Sin embargo, no existe un momento único y perfecto para hacerlo, ya que la decisión dependerá en gran medida de las circunstancias de cada persona. En este post te damos las claves sobre cuándo es mejor contratar un seguro de vida.

Mejores momentos para contratar un seguro de vida

Existen diversos acontecimientos que suelen impulsar a las personas a plantearse la contratación de un seguro de vida.

Independencia financiera

Al alcanzar la independencia financiera y convertirse en el principal sustento económico de la familia muchas personas consideran contratar un seguro de vida ya que, en caso de fallecimiento, el seguro garantizaría la estabilidad financiera de los seres queridos.

Matrimonio o inicio de vida en pareja

Formar una familia implica asumir nuevas responsabilidades y es normal querer buscar una protección que asegure el bienestar económico en caso de que uno de los miembros de la pareja fallezca. Para más información sobre los seguros de pareja, te recomendamos leer nuestro post.

Aumento de familia

Un hijo supone entre otras cosas un incremento de los gastos familiares, y un seguro de vida puede garantizar que las criaturas estén cubiertas (gastos cotidianos, educación…) en caso de la ausencia de uno de los progenitores.

Cambios personales que justifican un seguro de vida

Además de esto, existen cambios personales que pueden motivarnos para contratar un seguro de vida; a continuación te presentamos algunos de los más importantes.

Compra de una vivienda o adquisición de deudas significativas

Si has comprado una vivienda o has adquirido una deuda importante, como un préstamo hipotecario, un seguro de vida puede proteger a tu familia del pago de la misma en caso de que fallezcas y les evitará asumir tus deudas. Recuerda que el capital de tu seguro de vida puede ajustarse, por lo que si tus deudas son canceladas, el capital también deberá modificarse. Para más información te recomendamos leer nuestro post al respecto.

Cambios laborales

Si has iniciado un nuevo negocio o te has convertido en el principal proveedor de ingresos de tu empresa, un seguro de vida puede asegurar la continuidad del negocio o la estabilidad financiera de tus socios o empleados en caso de tu ausencia.

Planificación de la educación de los hijos

Un seguro de vida puede garantizar que tus hijos puedan formarse adecuadamente, por lo que puede ser una buena opción si estás planificando la educación de tus hijos.

Seguros de vida para etapas específicas

En la actualidad las compañías de seguros ofrecen pólizas diseñadas para cubrir las necesidades específicas de cada etapa vital.

Seguros para jóvenes profesionales

Suelen ofrecer primas más bajas y coberturas adaptadas a las necesidades de los jóvenes, como la cobertura por invalidez o la posibilidad de convertir el seguro en un plan de jubilación. Estos seguros suelen ir orientados al hogar, la salud o la familia, pero también son muy atractivos para emprendedores.

Seguros para padres y tutores

Priorizan la protección de la familia en caso de fallecimiento del asegurado. Algunos ejemplos de coberturas serían las guarderías o las ayudas para el pago de los estudios. Son ideales para personas que están planificando ser padres o madres, o a las que ya tienen descendencia (hijos de hasta 18 años, generalmente), y ayudan a sobrellevar los gastos y las necesidades económicas.

Seguros para previsión de jubilación

También llamados plan de pensiones, sirven para ahorrar hasta el momento de la jubilación; aunque también se contempla la cobertura de otras contingencias y muchos de ellos permiten además obtener una rentabilidad por los ahorros depositados. 

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En definitiva, no existe una edad para contratar un seguro de vida aunque en España suela hacerse en momentos determinados y/o cuando se tienen cargas familiares. La decisión de cuándo contratar un seguro de vida debe basarse en una evaluación de las circunstancias y necesidades de cada persona. No obstante, es importante recordar que cuanto antes se contrate un seguro, menor será la prima.